Agua: el nutriente olvidado

Ramiro Fernández Vuelta

Jefe de Desarrollo de Negocio Rumiantes

02 noviembre 2021
-
4 minutos

El agua es un nutriente muy importante para los animales, ya que interviene en múltiples procesos fisiológicos. Además de un metabolismo saludable, permite el transporte de nutrientes por todo el cuerpo y desempeña un papel importante en la gestión del calor. La carne y la leche también se componen en gran medida de agua.

Como ganadero, asegurarte de que tus animales tengan suficiente agua potable de buena calidad es primordial para un buen rendimiento. La calidad del agua se puede evaluar de varias maneras. Una vez que se determina que la calidad del agua de la fuente es buena, se debe prestar atención específica al posible desarrollo de biopelículas en las tuberías que pueden afectar la calidad del agua.

 

Los siguientes consejos te ayudarán a mantener el agua de tus animales limpia e higiénica.

En vacuno lechero, la ingesta de agua depende de la producción de leche, que a su vez depende de la ingesta de materia seca. Proporcionar a tus vacas suficientes bebederos con agua limpia es crucial. Además,  la demanda de agua  en litros aumenta más que la producción de leche en litros. Como regla general, la relación entre la ingesta de agua y la producción de leche es de 3,5 a 1, lo que significa que se necesitan al menos 140 litros de agua para producir 40 litros de leche. Durante el estrés por calor, la ingesta de agua es obviamente mayor. En el ganado de carne, la falta de un suministro adecuado de agua reducirá  la ingesta de materia seca y como consecuencia la productividad de los animales.


Evaluación de la calidad del agua

La calidad óptima del agua es importante para mantener a los animales sanos y garantizar un rendimiento óptimo.  Esto se puede evaluar a través de cuatro medios diferentes: visual, sensorial (sabor / olor), análisis físico-químico y análisis microbiológico. Asegúrate de analizar el agua de la fuente origen y al final de las tuberías, ya que a menudo se observan diferencias entre ambas muestras por falta de mantenimiento de tuberías.

Una evaluación visual y sensorial es una forma rápida y fácil de obtener una indicación inicial de la calidad del agua de tu granja.  Se hace mejor en el lugar donde beben los animales, preferiblemente al final de la tubería de carga de bebederos.  Después de muestrear, deja que el agua descanse en un cubo o vidrio transparente durante unos minutos y observa si hay signos de residuos en el fondo. Si el agua tiene un olor, color o sabor diferente, entonces es necesario un examen más detallado del sistema de agua potable.

El análisis físico-químico indica si el agua cumple las normas para la categoría animal de que se trate. Además del pH y la dureza, el contenido de minerales determina si el agua es adecuada. Los niveles anormales pueden afectar negativamente al sabor. Además, los niveles demasiado altos pueden hacer que se formen depósitos en el sistema, reduciendo los rendimientos del suministro de agua, mientras que las concentraciones excesivas de ciertos minerales pueden interferir en la absorción de algunos otros.

El análisis microbiológico muestra el número de microorganismos en el momento del muestreo.  Si encuentras niveles más altos de microorganismos que los adecuados para la categoría animal, es necesario identificar la causa de la contaminación y tomar las medidas adecuadas.  Una infección microbiológica a menudo se forma después de que el agua se bombea desde la fuente, ya que los depósitos de minerales y residuos orgánicos en las tuberías de agua (conocidos como biopelículas) son un excelente caldo de cultivo para los microorganismos.  Los residuos de estos permiten que gérmenes como la salmonela y la E. coli sobrevivan, crezcan e infecten a los animales a través del agua, incluso cuando el agua de origen es de calidad alta.

Obtén más información sobre nuestro enfoque de sostenibilidad global.

Descubre nuestro Programa de Nutrición Responsable

Consejos y recomendaciones para el ganado

Recomendaciones:

La altura optima de los bebederos es de 60-90 cm.

El tamaño del bebedero debe ser de al menos 120 x 40 cm.

Utiliza bebederos autovolcantes y límpialos a diario.

Coloca los bebederos de agua después de la sala de ordeño  y cerca del patio de alimentación.

 

Para saber más sobre el programa Natural Power contacta con un técnico del equipo de De Heus a través de este correo: naturalpower.es@deheus.com

Descubre más acerca del programa Natural Power
About the author

Ramiro Fernández Vuelta

Jefe de Desarrollo de Negocio Rumiantes

¿Quieres más información? Contacta conmigo