Aves de corral sanas: por qué es crucial garantizar el mejor comienzo posible

Aprovecha el poder natural de tus pollitos

Los pollitos que acaban de salir del cascarón empiezan su vida con los nutrientes esenciales que se concentran en los restos de saco vitelino. El ave, además, conserva la inmunidad básica que la gallina ha transferido al huevo. Estas reservas son de vital importancia, independientemente de que el pollito nazca en un espacio natural o en un criadero. En una nidada de huevos no todos eclosionan al mismo tiempo, por lo que los pollitos necesitan reservas de nutrientes para alimentarse hasta que llegue el momento de abandonar el nido. Asimismo, los pollitos que nacen en criaderos comerciales salen del cascarón en un periodo de entre 24 y 36 horas. Una vez que los pollitos salen de la incubadora, procesos como el sexado, la clasificación, la vacunación y el transporte añaden incluso más tiempo al periodo que va desde que nacen hasta su primera ingesta de comida. Teniendo todo ello en cuenta, este intervalo de tiempo se puede alargar hasta 72 horas, lo que provoca que los pollitos puedan perder peso y estén en riesgo de sufrir deshidratación.

Optimiza los primeros días de tu pollito

El hecho de poner agua y comida al alcance de los pollitos nada más nacer estimula su crecimiento, así como el uso del saco vitelino para el desarrollo del tracto intestinal y del sistema inmunitario del ave. Otra medida por la que pueden optar los criadores es reducir el intervalo de tiempo entre el nacimiento del pollito y la primera ingesta tanto de comida como de agua, mediante la reducción del tiempo de manejo y transporte, o incluso proporcionando alimento en la propia incubadora. Como alternativa, puedes eclosionar los huevos en la propia granja, desde donde tienen fácil acceso a los comederos y bebederos. En este caso, adquiere gran importancia que se lleve a cabo una correcta gestión de las incubadoras y que se proporcionen las condiciones ambientales adecuadas, teniendo en cuenta desde la temperatura y la humedad hasta la calidad del aire y la iluminación.

También existen otras intervenciones nutricionales específicas que puedes poner en práctica para optimizar el desarrollo de tus pollitos en esta etapa crucial de su vida. Diferentes estudios indican que el acceso temprano a nutrientes se traduce en un aumento de peso que se mantiene durante todo el ciclo de crecimiento. Este mismo enfoque favorece también el desarrollo de su sistema inmunitario, ya que provoca la mejora de la salud del ave durante toda su vida y reduce su dependencia de los antibióticos. El sistema digestivo de un pollito que acaba de salir del cascarón es inmaduro, por lo que es fundamental para su desarrollo que el animal reciba alimento de gran calidad. Esto incluye ingredientes de fácil digestión y con unos niveles nutricionales elevados, que la presentación o granulometría sea adecuada y de sabor agradable.

Los beneficios a largo plazo de la alimentación (óptima) temprana 

El peso de un pollito de siete días de vida tiene un impacto significativo en el rendimiento a largo plazo de los pollos de engorde y las gallinas ponedoras. Las aves que empiezan su vida en condiciones óptimas están más preparadas para hacer frente a retos que se puedan dar en el futuro, para mantenerse más sanas, crecer mejor y conseguir unos niveles más altos de producción. Proporcionar este apoyo a los pollitos durante sus primeros días de vida supone una gran inversión de tiempo y dinero, pero se amortiza con el tiempo.