Una mirada hacia el interior: Optimización de la producción de piensos en Egipto

Se podría decir que El Kady es un veterano de De Heus Egipto. Desde 2002, ha estado ayudando a construir las instalaciones desde cero. Aprovechó sus visitas a los Países Bajos para adquirir los conocimientos y habilidades necesarias para desarrollar y mantener una producción eficiente. No hace falta decir que, en estos 18 años, El Kady ha estado atento a la optimización de la fábrica, a sus trabajadores y a sus procesos. “Creo que nunca debemos sentirnos satisfechos con nuestro trabajo. Siempre podemos esforzarnos para desarrollarnos aún más". En su impulso personal por la mejora continua, El Kady cuenta con el apoyo de un gran equipo de liderazgo en Egipto. “Queremos mejorar cada año”, dice Yasmine Kamar, directora comercial de la división de Acuicultura. Su ambición no es solo optimizar los costes, sino también minimizar el impacto ambiental. “Establecemos indicadores clave de rendimiento anuales y cada departamento realiza un seguimiento mensual. Es muy emocionante ver cómo estamos logrando reducir nuestra huella y mejorando poco a poco cada año".

Potenciando el ingenio

Existen innumerables formas de optimizar la producción de alimentos para peces. Algunas de ellas son reducir la pérdida de alimento, apostar por la eficiencia energética o mejorar la gestión del agua. Sin embargo, hay un inconveniente que a menudo ralentiza los planes de Kamar: “Debido a nuestro método de producción, siempre hay una pequeña porción de alimento que necesita ser reelaborada. Se queda atrás y tiene que volver a entrar en la máquina. Pero hemos mejorado mucho. Desde que comenzamos las operaciones, hemos reducido el reproceso del 10% a solo el 2,5%, y nuestro objetivo es alcanzar el 1,5€ este año”, explica.

Por su parte, El Kady pudo mejorar la eficiencia energética resolviendo bloqueos en la extrusora de la fábrica. "Nos dimos cuenta de que la alimentación obstruía la extrusora, lo que significaba que se acumulaba cada vez más calor y presión". Se han llevado a cabo varias medidas para resolver este problema: “Usamos recetas de alimentos con menos almidón y tratamos de reducir el trabajo manual. ¡Con solo hacer el tamiz un poco más grande, hemos podido reducir el uso de energía en casi un 10%! Además, tenemos previsto instalar un nuevo triturador que nos ayudará a triturar más rápido sin perder capacidad productiva y ahorrar aún más energía. Por tonelada de alimento, esto implica una reducción de aproximadamente un 20%", explica visiblemente emocionado con la mejora.

Gracias al ingenio de El Kady, la fábrica pudo reducir a la mitad el uso de agua. “Descubrimos que gran parte de nuestra agua de condensación simplemente iba directa a las aguas residuales, ¡unos 2400 m3! Así que instalamos un nuevo tanque para permitir que esta agua se reutilizara para la caldera”. Son las pequeñas modificaciones las que hacen que la producción sea más eficiente. Tener la libertad de implementar cambios que no requieran grandes inversiones es importante para mantener todo funcionando en la planta. El Kady: “Damos el espacio necesario para analizar un desafío y encontrar una solución. No dejamos a nadie a la deriva, pero permitimos que cada uno implemente sus propios planes". Cuanta más experiencia obtengan los empleados en la fábrica, mejor podrán investigar problemas y encontrar soluciones como la de El Kady.

Impulsando un progreso predecible

Para desbloquear todo el potencial de la acuicultura en Egipto, es importante que la eficiencia de la producción de piensos llegue a toda la cadena de valor. “Una planta más eficiente significa menores costes de producción, lo que significa que nuestro alimento será más asequible para los acuicultores a largo plazo”, dice Kamar. Pero no solo hay ventajas económicas. “En De Heus siempre nos esforzamos por producir el mejor alimento posible. Por lo tanto, al mejorar la eficiencia, también trabajamos para mejorar la calidad. Por ejemplo, nuestro nuevo molino nos permitirá tener partículas más finas en producción, lo que mejora la estabilidad del agua y la estructura del alimento”.

Al ahorrar costes y optimizar la fábrica todos los días, se puede dedicar más tiempo y atención a los clientes. En este sentido Kamar señala: "Ofrecemos asistencia técnica, proporcionamos soluciones de alimentación personalizadas o asesoramiento sobre prácticas alimentarias y, en algunos casos, también podemos ayudar con la contabilidad".

Incluso obtienen apoyo mediante prefinanciación u otras formas de crédito. De esa manera, De Heus puede ayudar a los clientes a lidiar con la incertidumbre del mercado y ofrecerles un futuro predecible.