El periodo seco: una gran oportunidad para la prevención de enfermedades

Mantener a las vacas sanas es una parte esencial del trabajo de cualquier ganadero de vacuno de leche. Pero conseguirlo puede requerir un gran esfuerzo, sobre todo durante el periodo de transición entre lactaciones. Estas semanas cruciales antes y después del parto permiten que el tejido de la ubre de la vaca se regenere, eliminando viejas infecciones intramamarias y aumentando la producción de leche durante la siguiente lactación.

Además, el periodo de transición también es una etapa de riesgo para las enfermedades comunes del ganado lechero como la hipocalcemia, también conocida como fiebre de la leche. De hecho, tras varios años de investigación sobre el terreno, hemos identificado una tasa media de incidencia de hipocalcemia del 66,7% en los rebaños lecheros. El impacto económico global de la hipocalcemia es de 113 euros por animal, por lo que la desventaja económica para una granja de tamaño medio con 100 partos puede alcanzar fácilmente los 7.500 euros al año o más.

Más vale prevenir que curar

Sin embargo, estos costes pueden evitarse. Gestionando activamente el periodo seco, los ganaderos pueden aliviar en gran medida el impacto sanitario y financiero de la hipocalcemia y de otras enfermedades similares.

Las investigaciones realizadas por De Heus y varios institutos científicos destacan cuatro pasos clave para la prevención eficaz de enfermedades. Dos de ellos están relacionados con las prácticas de manejo de las explotaciones y consisten en acortar el periodo seco y reducir el uso de antibióticos durante la fase de transición.

Las otras dos investigaciones se centran en la nutrición, incluyendo un nuevo método para reducir la Diferencia Catión-Anión de la Dieta (DCAD) durante el periodo seco, así como nuevas directrices para los macrominerales como el fósforo. Las cuatro opciones desempeñan un papel importante en la prevención de la hipocalcemia, así que, cuando se aplican conjuntamente, su impacto puede ser significativo.

Una estrategia de manejo del periodo de transición bien aplicada permite prevenir varias enfermedades antes de que tengamos que buscar soluciones. Al intervenir en la salud de las vacas antes de que las enfermedades aparezcan, los ganaderos pueden ahorrar un tiempo y esfuerzo muy valiosos -además de dinero- a largo plazo. Además, unos animales sin enfermedades favorecen la salud general del rebaño y el rendimiento de la lactancia a largo plazo. Así que, la próxima vez que te plantees cómo gestionar el periodo de transición, piensa en él como una oportunidad para la salud de tu rebaño.